Mis labios se deslizan
con besos exóticamente apasionados
sobre tu piel frágil y lisa
curiosamente extraños
mágicamente tiernos locos enamorados
…simplemente extraños.
Mi cuerpo. Enredado a tus brazos
donde yace una caricia tierna entre tus
pechos
ajustando mis labios
y entre mis mejillas
que recorre y baja hacia tu ombligo,
una gota de sudor.
Mis ojos. Que no descuidan esos lazos
que sostienen tus pechos
lazos negros, que embriagan mis labios
…como vino. Adormeciendo mis mejillas
y sin saber si soy rico o mendigo
te ofrezco solo mi amor.
Mis oídos. Escuchan un suspiro,
un te amo y un sigue por favor.
Llegue a tu ombligo, y aspiré esa gota de
sudor
muy suavemente, con cautela y sin
respiración.
Y besé cada centímetro de ti,
De tu cuerpo símil al de una diosa.
Y fue mío lo tuyo, tuyo lo mío. Como el
respiro
excitado de nuestro amor,
el poema suave del ensueño, que calmaba
el sudor;
y una vieja pero romántica canción.
Recuerdo que besaste cada centímetro de
mí
Y que hicimos de esa noche… una noche
hermosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario